Fernando. Información para el usuario

¿Qué es Fernando y para qué se utiliza? Fernando contiene el principio activo del optimismo inconsciente. Incluye también bisulfato de introversión, dióxido de impaciencia y celulosa del conformismo. Pertenece a la familia de los antidepresivos.

¿Qué necesita saber antes de empezar a tomar Fernando? No tome Fernando si es alérgico a los libros, la música, el deporte, el cine y los viajes. Tampoco lo haga si tiene úlceras emocionales, inflamación crónica de la mentira, alma tóxica activa o victimismo arterial muy alto. Niños y adolescentes: no se recomienda el uso de Fernando en niños y adolescentes menores de 18 años. Para los primeros se comercializó una versión hace unos años orientada a la educación, anticoagulación de los valores y prevención del botellón. Actualmente este producto está agotado. Para los adolescentes, este laboratorio no ha conseguido hasta la fecha ningún medicamente capaz de resolver esta patología. Uso de Fernando con otras personas: informe a su médico si está utilizando otras personas incompatibles con Fernando. Las siguientes personas pueden anular el efecto: egocéntricos, dicotómicos, traidores y engreídos. Conducción y uso de máquinas: Fernando puede afectar a la conducción de las vidas si no se le facilita espacios y momentos de soledad. Fernando puede contener trazas de ostracismo. Si su médico le ha dicho que tiene una intolerancia a las rutinas, hable con él antes de tomar Fernando.

¿Cómo tomar Fernando? Siga exactamente las instrucciones de su médico. Dosificación: para tratamientos con desconocidos tomar Fernando una o dos veces al trimestre. Con amigos administrar una dosis mensual. Familiares e íntimos consumir a demanda. Si toma más Fernando del que debe: es muy improbable que se dé esta situación, el propio Fernando ya viene preparado para inhibirse y desaparecer en caso de tratar de consumir mayor dosis de la recomendada. En cualquier caso, si sucediera, notará que temporalmente los pensamientos se enquistan y se vuelven recurrentes. Si olvidó tomar Fernando es probable que no ocurra nada, aunque mentalmente se anticipen distintos niveles de ansiedad que finalmente nunca se producen. En algunos ensayos clínicos se ha catalogado a Fernando como placebo.

Posibles efectos secundarios: Fernando puede presentar reacciones adversas, aunque no todas las personas las experimenten. Frecuentes: indiferencia, aburrimiento, sueño. Poco frecuentes: envidia, desprecio, ignorancia. Raros: deserción, ambición

Aspecto de Fernando y contenido del envase: cada producto contiene 78.000 gramos de Fernando. Se presenta en blisteres de diez unidades con acabados diferentes: amigo disfrutón, padre controlador, ejecutivo disperso, runner relajado, lector ambicioso, hipocondriaco realizado, esposo equilibrado, hijo preocupado, escritor ocasional y utópico acomodado. Fernando huele a tomates, café y pan tostado por las mañanas. Por las noches a refugio y sueños poco hechos. Contiene cicatrices interiores que aseguran su caducidad.

Conservación de Fernando: mantener a Fernando fuera de la vista y del alcance de futuros amigos, no está preparado para asumir costes emocionales adicionales. No utilice a Fernando en las horas de descanso. Fernando no requiere condiciones especiales de conservación. No se le debe tirar por los desagües ni a la basura. Pregunte a su farmacéutico cómo deshacerse de Fernando, de esta forma ayudará a proteger el medio ambiente.